El pasado día de 16 de Octubre asistí al concierto de Amaral en la asquerosa sala Riviera de Madrid, lo cierto es que con este grupo siempre he tenido una especie de gafe para los conciertos que menos mal que en los últimos años se esta corrigiendo porque me perdí las giras de "Estrella de mar" y "Pajaros en la cabeza" porque o tocaban un día que estaba fuera de Madrid, o coincidía con un episodio de Shin-Chan o ese día tenia que ir al veterinario, en fin un cumulo de mala suerte que impidió que les consiguiera ver en directo aunque una idea me podía hacer tras haberme comprado el DVD "El comienzo del Big bang" que recoge un concierto del grupo en Barcelona el año 2005.
No fue hasta que tocaron en el Circo Price hace tres años que por fin pude disfrutar de un concierto del grupo, el concierto era de los últimos que daban en el marco de la gira del excesivo "Gato negro Dragón Rojo", y la verdad es que salí encantado de un espectáculo muy generoso en duración y calidad, reafirmándome la opinión de que Amaral es hoy por hoy el mejor grupo de nuestro panorama musical, si luego además son de los poquisimos artistas que demuestran una innegable honestidad a la hora de desenvolverse en ese puticlub que es el pop nacional pues ya no te queda otra que caer rendido a sus pies porque encima de ser buenos puedes escuchar o leer entrevistas suyas sin que te de vergüenza ajena, constatando que estamos ante personas con una cultura bastante superior al musiquillo mainstream medio español y dejando por los suelos a los acomplejados indies que les miran con esa envidia tan malsana típica de los españoles.
Con todo reconozco que Amaral ya están de bajada y es que en la vida de los grupos siempre se repite el proceso de subida, momento cumbre y bajada, claro que hay algunos que bajan y otros que caen a los infiernos. En mi opinión la subida de Amaral se produjo con sus dos primeros albums y su momento cumbre estubo con "Estrella de mar" + "Pajaros en la cabeza", esos discos tienen melodias perfectas y nos mostraban a un grupo con un sonido muy personal que destacaba de forma casi insultante sobre la mediocridad reinante.
Luego como siempre vino la bajada con "Gato negro Dragón Rojo" un disco demasiado largo que si hubiese tenido 11 o 12 canciones hubiese sido perfecto, su ultimo álbum "Hacia lo salvaje" sigue la senda hacia el rock que ya marcaba el disco anterior pero "Hacia lo salvaje" es mas crudo sin apenas adornos, un disco notable pero que no llega ni de lejos al nivel de su época de oro.
Muchos quisieron ver en Amaral a los nuevos Mecano, en realidad en el pop español siempre se ha buscado unos nuevos Mecano y desde luego esa búsqueda de momento no ha dado sus frutos, Amaral bien podrían haberlo sido, su música era tan comercial y tenia tanta calidad como la de los Cano, además Eva y Juan no le meten las patadas al diccionario que le metían Mecano, sin embargo para ser unos nuevos Mecano, Amaral hubiesen tenido que meterse en el circo comercial que se metieron los madrileños, y para eso hay que tener grandes tragaderas y estar dispuesto a todo por ser una estrella, como patrocinar bebidas refrescantes o darle tu nombre a un coche, cosa que no puedo imaginar de Eva y Juan.
El concierto se celebraba en la riviera, la sala de referencia de Madrid, y es una pena que sea así pero éste es el único recinto de capacidad media con el que cuenta la capital de España, una discoteca para 2.500 personas con un sonido asqueroso y una puta palmera en medio que dificulta la visión, Amaral iban a realizar 2 conciertos en esta sala y yo asistí al primero que se celebro el martes.
Llegue a una Riviera abarrotada de gente que dejaba claro el enorme poder de convocatoria que aun tiene Amaral con dos noches vendidas, es decir que 5000 personas pasaron por caja y pagaron los 24 euros que costaba la entrada, todo un logro en los tiempos que corren donde casi todos los conciertos que se hacen los pagan los ayuntamientos y la gente va gratis o casi gratis.
Había quedado con Monsieur Bart y Madame Vicky para ver este concierto pero un contratiempo les retraso y me decidí a esperarlos dentro. El escenario ya estaba montado, todo muy austero con una pantalla en la que se suponía que se proyectarian imagenes y si que se proyectaron durante el concierto pero fueron de una cutrez que te hacía preguntarte porque demonios se habían molestado en llevar algo tan mediocre. Me fui a tomar algo a la barra y pedí un mini de birra por el que me clavaron la friolera de 9 euros estos hijos de puta de La Riviera, yo de verdad que alucino con los precios de las salas cuando hay concierto, incluso a mi propia madre le clavaron 12 euros por un mini de cerveza en la sala arena cuando fue a un concierto, en fin que coño se creerán estos mindundis? que estamos en Londres o en París? En mi cerebro se grabo una consigna a fuego "jamas beber nada en un concierto, hay que venir de casa bebido".
Para mi sorpresa no hubo ningún telonero, con bastante puntualidad el grupo salio a escena en una formación bastante simple pero efectiva, guitarra, bajo, batería, Juan y Eva, el show empezó fuerte con el tema que da titulo ha su ultimo album "hacia lo salvaje" tras la cual atacaron "esperando un resplandor" una de mis canciones favoritas de su ultimo álbum que sinceramente pienso que debió ser el single de presentación pues me parece mucho mejor que la canción de la tortuguita, tiene mucho mas gancho y recupera en parte el espiritu de "Estrella de mar".
Con el publico ya entonado llego el primer gran exito de la noche "el universo sobre mi" que fue muy bien recibida por un publico que demandaba hits, y Amaral se los iba a dar en un concierto largo, muy largo pero que en ningún momento resulto excesivo sino generoso.
Por fin me pude reunir con Monsieur y Madame y juntos nos movimos un poco intentando buscar el mejor sitio posible, hicimos lo que podímos pero la jodida palmera no se movía, daban ganas de sacar un hacha y podarla hay mismo.
Mas éxitos llegarían como la simple "kamikaze" o ese temazo que es "moriría por vos", el grupo sonaba muy rodado, solido y sobretodo muy rockero, Amaral han prescindo casi totalmente de teclados, los únicos que sonaron esa noche fueron los que hacia Juan Aguirre muy de vez en cuando pues como sabemos Juan no se separa de su guitarra ni para ir al baño aunque aun le tiene mas apego a su gorro, que se ha convertido en parte de la imagen del grupo, Eva por su parte salio con un pantalón muy ajustado y una blusa que le quedaba como un guante, mostrando una energía desbordante durante todo el show.
El viraje hacia el rock de Amaral se acentúa aun mas en directo con una Eva que por momentos parecía destinada a convertirse en nuestra rockera nacional ya que no hay ninguna, el sonido sin adornos nos mostraba versiones bastante mas crudas de sus temas pasados como "un día mas", "las puertas del infierno" o "Estrella de mar", esta ultima en una versión tan celebrada como acertada, con unas guitarras incisivas que dibujaban las melodías de los ausentes sintetizadores.
El grupo nos aviso desde el principio de que esa noche nos caerían los doce temas de "Hacia lo Salvaje" cosa que no me gustó, nunca he estado a favor de este tipo de cosas y comprendo que si vas a un concierto te van a caer 6 o 7 temas del ultimo album que da titulo a la gira pero que te metan todo el álbum me parece absolutamente excesivo, pues nos lo comimos enterito, por allí pasaron entre otras "como un martillo en la pared" o "si las calles pudieran hablar", canciones bastante disfrutables aunque lejos de sus mejores temas.
Entre medias de todos estos temas recientes se intercalaron canciones mucho mas conocidas como ese trallazo que es "Big Bang", terminando la primera parte del concierto con el tema "no se que hacer con mi vida" de su álbum debut.
Tras esto llego el momento Juan Aguirre, que es esa parte del concierto donde se arranca a cantar una canción, en esta ocasión recupero "Tardes" del primer álbum del grupo y ahí se quedo la cosa, como tiene que ser, hay que dejar cantar a los que saben cantar y Eva volvió para seguir demostrando que es la mejor voz del panorama nacional con temas como "olvido" (la cual dedicó a su madre fallecida), el gran éxito "como hablar" o "Antartida".
La recta final se iba encaminando con una versión bastante guitarrera de "días de verano", a la que siguió el clásico "have you ever seen the rain" de Creedence Clearwater Revival, toda una sorpresa muy aplaudida.
"van como locos" acelero la maquina para llegar al final con "En solo un segundo", quizás la mejor canción del grupo en la que Eva hizo ya su habitual performance con el Theremin.
El grupo se despide y deja el escenario haciendo el paripé que hacen todos los grupos y que no se porque lo hacen, a mi eso de los bises me pareció siempre una soberana gilipollez, si no se encienden las luces sabes que el show no se ha acabado, así que no se porque hacen toda la chorrada esa de que me voy pero luego vuelvo.
Como es lógico el grupo volvió a salir para realizar una versión/homenaje a la recientemente fallecida Chavela Vargas, tras la cual llego la inevitable y exitosa "sin ti no soy nada" en una versión mucho menos rítmica que podríamos calificar de semi-acústica, la cual les quedo muy bien y además se agradece que se haga algo diferente con temas tan trillados. A pesar de lo quemada que está la canción aun me sigue pareciendo de lo mejor de su repertorio.
El grupo se volvió a despedir nuevamente de mentirijilla con "Revolución", en una magnifica versión en la que se mezcla con la canción de Bowie "Heroes" aunque más bien habría que decir que en realidad esta mezclada con la versión que hicieron Parálisis Permanente de este tema mítico en 1982 e incluida en el único álbum del grupo de Eduardo Benavente "El Acto".
Pero todos sabíamos que tenían que volver a salir pues las luces no se habían encendido y por otro lado les faltaba por cantar una canción del ultimo álbum, así que salieron y la cantaron, se trataba de "cuando suba la marea", uno de los singles de "Hacia lo salvaje", tras la cual hubo gran ovación con dos enormes ramos de rosas para Eva y Juan, no era para menos, habían sido 2 horas y cuarto de concierto y 28 canciones en un potentisimo directo bastante rockero con un sonido bastante bueno teniendo en cuenta la mierda de sala en la que nos encontrabamos. En fin, todo el mundo feliz, un repertorio generoso y a la vez conservador, una entrega total con cero artificios y un savoir faire que volvió a demostrar lo alejados que están Eva y Juan de todos los demás.
Que sigan así por mucho tiempo y que dejen lo de las proyecciones, no es lo suyo.
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